
Después de volver a ponerme mi chaqueta más vieja
me he dado cuenta de que en los bolsillos estás tú,
de que se me enfrían las manos si las saco.
Has traído junio a noviembre
y he guardado entre la historia
las hojas que me he ido encontrando por el suelo.
Cuando las ramas están secas
hay que regarlas desde la raíz.
Sin querer me he acordado de todas las piezas que faltaban
y de que el motor no estaba entre ellas
y he hecho un arreglo a algo que no dejó de funcionar.
Corre,
has llegado una vez más
y has agotado el tiempo
cuando parecía que estaba lleno.
Se me estancan los recuerdos
cada vez que la madrugada avanza,
y aunque ya no tenga cuentos que contar
no se me acaban los puntos seguidos.
Coge de mi cajón lo más absurdo que encuentres
y escóndelo en el tuyo.
Coge lo peor que veas y destrúyelo sin que me entere.
😢
Me gustaLe gusta a 1 persona
👏👏👏👏
Me gustaLe gusta a 1 persona
Siempre quedan piezas que encajar para que los sentimientos vuelen de estación en estación…
Lindo, Elena. Un abrazo.
Me gustaLe gusta a 1 persona
Y perdido en los recuerdos de ti, me quedé frío, el tiempo se congeló a mi alrededor y ya nada consiguió volver a calentar mi corazón.
Corazón congelado, que cuando tropecé y caí, estalló en millones de diminutos pedazos, y con él, llegó mi decisión de irme, de poner fin a una historia acabada que no comprendo y que cada vez me interesa menos… quizás por mi corazón, congelado, esperando caer…
Me gustaLe gusta a 1 persona